domingo, 27 de septiembre de 2020

SANTA TERESA DOCTORA DE LA IGLESIA

(ARTÍCULO INCOMPLETO: BUSCAR EN:DE LA PLUMA A LA RUECA) 

 Lecciones de la Doctora Teresa  

Doctora para una Iglesia en crisis y el proceso de su Doctorado Publicado el 25/09/2020 por MJ Daniel de Pablo Maroto, ocd “La Santa” (Ávila) La Doctora Teresa nos ha dado tres lecciones desde esta cátedra de papel. El Dios revelado en la “experiencia mística” de Teresa. Dios suma Verdad. Y Nuestro Dios es Amor. En esta última entrega, en el día del 50 aniversario de su proclamación oficial del Doctorado en la Iglesia (1970-2020), aprovecho la ocasión para presentar dos historias que se complementan. En primer lugar, el Proceso canónico seguido por la Santa Sede para conceder el título oficial de Doctora de la Iglesia a santa Teresa de Jesús, una mujer. Por primera vez se rompía la barrera del obstat sexus, lo impide el sexo (femenino), fundado en unos textos de san Pablo: “No permito a las mujeres enseñar” (1Tm, 2, 12) y “Las mujeres se callen en la iglesia” (1Cr, 14, 34), afirmaciones de orden disciplinar tomadas por la tradición como norma inviolable. De hecho, hasta ahora todos los admitidos como “Doctores” de la Iglesia eran varones, entre ellos algunos de los considerados como “Padres” de la Iglesia. Fue el papa Pablo VI quien se atrevió a romper la tradición el 15 de octubre de 1967, fiesta de santa Teresa, durante la Eucaristía de la Basílica del Vaticano dirigiéndose a los asistentes al “Tercer Congreso mundial del Apostolado seglar”, propuso a santa Teresa como una cristiana “comprometida” en ese apostolado mediante la oración y la unión con Dios. “Nos proponemos -dijo- reconocerle a ella un día, igual que a santa Catalina de Sena, el título de Doctora de la Iglesia”. Añado por mi cuenta que lo es por otras varias razones: por ejemplo, por su conciencia de ser un miembro en Iglesia, por su deseo de misionar y “salvar almas”, de “dar voces” pregonando quién es Dios, por el ejemplo de vida santa y su sabiduría, etc. La noticia la divulgaron los medios de comunicación de todo el mundo. A partir de entonces se puso en marcha la maquinaria de un proceso canónico que duró años e indica la importancia que tiene el acto en la tradición de la Iglesia, sobre todo sabiendo su aspecto revolucionario. Previo a la declaración solemne del Papa, varios especialistas en materias eclesiásticas elaboraron dos documentos llenos de sabiduría canónica, teológica, histórica que se ofertaron al Papa que es el que proclama a la candidata como “Doctora” de la Iglesia. El primero con el título de Positio Peculiaris, previo a la proclamación de la noticia por el Papa el año 1967 y concluyendo que la candidata tenía los méritos suficientes para concederle el título. Respondieron positivamente cuatro especialistas en Sda. Escritura, teología dogmática y teología e historia de la espiritualidad que la Iglesia puede conferir el título de “Doctora” a las mujeres, hasta entonces con respuesta negativa. Fue la puerta abierta para la elaboración de un segundo documento mucho más completo, la propiamente llamada Positio, realizado en la Sagrada Congregación de las Causas de los Santos en la que colaboraron muchos especialistas, a los que se añaden las “peticiones” de las congregaciones religiosas, cardenales, arzobispos, obispos, universidades civiles y eclesiásticas, Facultades de Teología, personalidades prestigiosas, etc. En síntesis, las voces provenientes de muchos y variados ambientes. Es un verdadero monumento de saberes varios, precedidos por la “petición” oficial del Padre General de la orden de los carmelitas descalzos, Miguel Ángel de San José. Importancia especial tiene el “Voto” de la Facultad de Teología del Teresianum, en Roma, de los carmelitas descalzos, fundado en “razones” históricas, teológicas, litúrgicas y de actualidad. Y concluye la “Positio” con los votos positivos de cuatro teólogos aprobando la proposición y la oportunidad de declarar Doctora de la Iglesia a santa Teresa de Jesús. Todo concluyó con la declaración del papa Pablo VI el 27 de septiembre de 1970: “Declaramos a Santa Teresa de Jesús, virgen de Ávila, Doctora de la Iglesia universal”.

lunes, 21 de septiembre de 2020

Derecho a algo más que la eutanasia

 

Derecho a algo más que la eutanasia

por Blogger

DERECHO A ALGO MÁS QUE LA EUTANASIA
GABRIEL Mª OTALORA, gabriel.otalora@outlook.com
BILBAO (VIZCAYA).

ECLESALIA, 21/09/20.- Siguen adelante los trámites parlamentarios sobre la ley de eutanasia que afecta a las personas con una enfermedad “grave e incurable" o, en su caso, "crónica e invalidante" y que provoque un sufrimiento "intolerable". La finalidad legal de la proposición de ley es hacer compatibles el derecho a la vida y el derecho a "la dignidad, la libertad o la autonomía de la voluntad", según consta en el preámbulo del texto y desde la base al derecho a una buena muerte.

Para solicitar la eutanasia se propone que no sea un requisito que el médico dé su permiso, ya que la decisión de presentar esa petición será del paciente. Lo que sí se contempla en el borrador legal es que los facultativos que intervienen en el proceso tengan el deber de determinar que el paciente cumple los requisitos; y la posibilidad de la objeción de conciencia.

El tema es serio, sin duda: personas llenas de lucidez atrapadas en medio de enfermedades irreversibles y con grandes dolores que disparan el sentimiento de inutilidad, depresión o la falta de sentido vital, poniendo a prueba sus fundamentos éticos y morales y los de sus familiares. Contra lo que cree mucha gente, la eutanasia activa así entendida, está prohibida en casi todo el mundo. Cosa distinta es alargar la vida de modo irracional (distanasia) u otorgar al paciente todos los tratamientos para disminuir el sufrimiento y eviten largas agonías (ortatanasia).

Cada vez que no se acepta que una persona tiene valor en sí misma se abre la puerta al precipicio del utilitarismo (tanto vales, tanto cuentas) que nos aboca a dejar de respetarnos y a considerar inútiles y costosos a colectivos enteros. Precisamente porque cada ser humano es valioso por serlo, su autonomía es una consecuencia de su dignidad. Pero  algunos lo entienden al revés: la dignidad es una consecuencia de la autonomía, sin valorar demasiado las consecuencias. Es una de las razones por las que soy contrario a la eutanasia activa.

El problema es serio y por eso hay que verlo también desde otro ángulo que apenas se habla, quizá porque no se han hecho los deberes cuando estamos a las puertas de la eutanasia legalizada. Me refiero al derecho a los cuidados paliativos, al que una gran parte considerable de la población no tiene posibilidad de acceso ante la escasa implantación hospitalaria del mismo. Cuidados paliativos en sentido amplio, es decir, atención médica, social, emocional y espiritual que la enfermedad plantea, incluyendo los cuidados para enfermos terminales. Cuando las personas se sienten mejor en estas áreas, tienen una mejor calidad de vida y la eutanasia deja de ser una prioridad en muchos casos.

Según datos de la Sociedad Española de Cuidados Paliativos y la Asociación de Enfermería y Cuidados Paliativos (abril 2019), casi 80.000 personas que necesitaban cuidados paliativos, no los recibieron. España muy por debajo de los estándares de los países más desarrollados. El problema añadido es que, incluso cuando exista una ley que acompañe a la tramitación de la ley de la eutanasia, si no está dotada de presupuesto, la universalización de este derecho puede quedarse en papel mojado.

Como afirma la Organización Mundial de la Salud (OMS), los cuidados paliativos son pilares esenciales en la atención  en los pacientes en fases avanzadas y terminales, como en el caso del cáncer, por ejemplo. En este sentido, Los médicos tienen que recibir mucha más formación sobre el proceso de morir en la carrera universitaria, sobre inteligencia emocional. Junto a la necesidad de medicalizar el sufrimiento en el final de la vida, deben coexistir los aspectos más subjetivos (valores, emociones, cuidados, etc.) para tratar a cada paciente desde todas las dimensiones de la persona: bio-psico-social y espiritual.

Si todos los enfermos terminales tuvieran la posibilidad de solicitar y recibir este derecho de los cuidados paliativos, es posible que no fuese necesario la regulación legal de la eutanasia como la garantía de la muerte digna. Pero para que exista una decisión libre y se respete la dignidad en el proceso de morir hace falta que exista la alternativa de unos verdaderos cuidados paliativos. Esto exige, claro, repensar nuestra concepción de la dignidad humana y el uso que hacemos de la libertad, porque el resultado no es indiferente. Poner punto final a la vida es tan importante como nacer. Existen muchos avances en torno al parto y morir es igual de importante. Es fundamental ayudar a que la persona se sienta querida hasta el final, que sepa que no está sola y que no sufra en la etapa final de la enfermedad.

Si ganan los políticos que solo piensan en bajar impuestos, no será posible. Y si se dicen cristianos, es que no han entendido nada (Eclesalia Informativo autoriza y recomienda la difusión de sus artículos, indicando su procedencia).

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sábado, 12 de septiembre de 2020


 Queridas amigas del grupo de lectura, como sabéis estamos estudiando cómo iniciar nuestras actividades. Esperamos poder hacerlo con un pequeño grupo presencial  y el otro grupo por vídeo conferencia. Algunas habéis expresado ya vuestras preferencias. Por supuesto lo tendremos en cuenta y os iremos comunicando el lugar y la forma de hacerlo.

Hoy María que se incorporó este año, nos ha ofrecido un cuentecillo que me ha parecido muy expresivo para animar el rescoldo... Os lo mando con un fuerte abrazo y con el deseo de "encontrarnos" pronto.

Un cuento para empezar…

Un hombre, que asistía periódicamente a encuentros con sus amigos, de repente, sin avisar, dejó de participar en sus actividades.

Pasadas unas semanas, una noche muy fría, un integrante del grupo decidió visitarlo.

Encontró al hombre en casa, solo, sentado ante la chimenea. En ella ardía una hoguera brillante y acogedora.

Adivinando el motivo de la visita, el hombre le dio la bienvenida. Se hizo un gran silencio.

Los dos hombres sólo contemplaban la danza de las llamas alrededor de los troncos de leña que centelleaban en la chimenea.

Pasados unos minutos, el visitante, sin decir nada, examinó las brasas que se formaban y eligió una, la más incandescente de todas, y la retiró a un lado de la chimenea con unas tenazas.

Entonces volvió a sentarse.

El anfitrión prestaba atención. Al cabo de un rato, la llama de la brasa solitaria disminuyó hasta que, finalmente, brilló momentáneamente y su fuego se apagó. De repente.

En poco tiempo, lo que era una muestra de luz y de calor, no era más que un negro, frío y muerto pedazo de carbón.

Intercambiaron muy pocas palabras, aparte del saludo.

Antes de prepararse para marchar, el visitante volvió a coger ese trozo carbón, ahora frío e inútil, con las tenazas y lo volvió a poner en el centro del fuego.

Inmediatamente, ese carbón se volvió a encender, alimentado por la luz y el calor de las brasas que tenía a su alrededor.

El anfitrión le dijo: "Gracias por tu visita y por tu bellísima lección. Volveré al grupo".

¿Por qué se extinguen los grupos?

Muy simple: porque cada integrante que se retira reduce el fuego y el calor del resto.

A los integrantes de un grupo hay que recordarles que forman parte de la llama.

Es bueno recordarles que todos somos responsables de mantener nuestra llama (la de cada uno de nosotros) encendida, y que debemos promover la unión entre todos para que el fuego sea realmente fuerte, eficaz y duradero.

No pasa nada si, a veces, nos molesta que lleguen tantos mensajes al chat. Lo que es importante es estar conectados, algunos en silencio, otros muy activos, con nuestras diferencias de opinión y de carácter.

Los amigos estamos para conocernos, aprender, intercambiar ideas o, simplemente, para saber que no estamos solos, que hay un grupo de Amigos y Familia con el que podemos contar.

Mantengamos viva la llama.

Aunque algunos sólo envíen mensajes esporádica-mente, es bueno saber que mantienen su llama encendida.

¡Gracias a cada una de vosotras para formar parte de mi hoguera !

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