El obispo
de Niza pide responder al odio asesino con el testimonio del amor cristiano
El
obispo de Niza, monseñor André Marceau, señaló en un comunicado–traducido al
español por la Agencia Zenit–, que tras el atentado terrorista que dejó unos 80
muertos, su diócesis se encuentra «golpeada y herida». Porque «la violencia
ciega, el odio, y de otro lado la barbarie, han producido muerte». Ante este
drama invita a no dejarse condicionar y responder dando testimonio del amor
cristiano
Monseñor Marceau señala
que todos están bajo shock, sea los familiares y amigos de las víctimas,
quienes estaban allí presentes, así como los que realizaron la labor de socorro
que trabajaron toda la noche. «No es posible comprender un acto tan inhumano.
Nada puede legitimar la locura asesina y la barbarie» expresa.
Invita por ello a la
población a no encerrarse en sí misma, a no discriminar o guardar odio. Y a no
temer miedo de encontrar a sacerdotes o personas que puedan ayudarles. Solicita
también a los habitantes de Niza que logren estar próximos de las demás
personas, en los barrios y en las comunidades cristianas, en los lugares de
encuentro, trabajo o asociaciones, llevando apoyo, esperanza y solidaridad.
Y recuerda que este Año
de la Misericordia es un llamado para cambiar los corazones y que a través de
la oración debemos «dirigirnos a quien es el maestro del amor. Porque Cristo
fue goleado en la cruz».
«De su corazón traspasado, de su corazón herido de muerte, el corazón de Dios, el agua y la sangre emanaron, nos dice el apóstol Juan. Ondas de amor fluyeron al suelo. No dejemos que este tesoro se pierda», escribe.
«De su corazón traspasado, de su corazón herido de muerte, el corazón de Dios, el agua y la sangre emanaron, nos dice el apóstol Juan. Ondas de amor fluyeron al suelo. No dejemos que este tesoro se pierda», escribe.
«Cristianos, católicos,
llevemos este mensaje de amor entorno nuestro», concluye, «porque nuestra
sociedad lo necesita».
No hay comentarios:
Publicar un comentario