lunes, 29 de junio de 2009

ISLAM

10º envío




Una religión plural



Como el resto de tradiciones religiosas, el Islam es fundamentalmente heterogéneo y plural. No es cierto, por lo tanto, que exista un solo Islam, único y homogéneo, sin aristas, idéntico a sí mismo en todo tiempo y lugar. Al mismo tiempo, cabe decir que los musulmanes han generado formas plurales de concebir y vivir la fe islámica. Una de dichas formas lo constituye el tasawwuf o sufismo, verdadera dimensión interior, iniciática y mística del Islam, que ha servido, al mismo tiempo de fuente de inspiración inestimable para las distintas artes islámicas.
Dos fuentes y cinco pilares
Las dos fuentes espirituales en las que bebe el Islam son, primeramente, el Corán y, en segundo lugar, el ejemplo muhammadiano o sunna que incluye el conjunto verificado de dichos, hechos reflexiones, consejos… del profeta del Islam. En último término, el ejemplo de Muhammad constituye para el musulmán una explicación práctica del mensaje coránico. En cierto modo, el profeta es el Islam.
En ambas fuentes el musulmán ha buscado respuesta a las dos preguntas que desde los primeros tiempos se ha planteado todo creyente: qué significa ser musulmán y cómo ser musulmán en cada tiempo. El musulmán está impelido a mantener una reflexión permanente con dicho corpus de sabiduría que vaya de las fuentes a la realidad y de la realidad a las fuentes, gracias a una constante reflexión adaptativa, dinámica y selectiva. El llamado iytihad o esfuerzo interpretativo es el instrumento práctico con que el musulmán ha contado a lo largo de los tiempos para hacer frente a los desafíos de cada época y contexto. Dicho esfuerzo interpretativo exige del creyente una razón siempre activa. Y es que una vivencia espiritual intensa y apasionada no tiene por qué comportar un déficit de inteligencia.
Cinco son los pilares fundamentales sobre los que se apoya el Islam. El primero, la shahada o profesión de fe expresa el sentimiento más íntimo del ser musulmán. Consta de dos enunciados: “No hay más divinidad que Dios” y “Muhammad es el mensajero de Dios”. Ambos constituyen la esencia unicista del mensaje coránico.
Los cuatro pilares restantes muestran el camino que permite y facilita cómo ser musulmán. Son: salat o plegaria ritual, zakat o solidaridad económica, saum o ayuno del mes de Ramadán, mes en que fue revelado el Corán, y hajj o peregrinaje ritual a la ciudad de La Meca, fontana de la fe islámica.



Voces sufíes
“Oh Dios, guarda para tus enemigos los bienes terrenales que me hayas reservado y para tus amigos los bienes celestiales. Tú sólo me bastas. Oh Dios si te adoro por miedo al infierno, arda yo en el infierno. Si te adoro ansiando el Paraíso, exclúyeme del Paraíso. Pero si te adoro por Ti mismo, no me prives de Tu belleza eterna”
La religión de los que se atan a una determinada forma de Dios, implica negar las creencias de los demás. Si comprendieran el sentido de la palabra de Junayd: “el agua toma el color del recipiente” reconocerían a Dios en todas sus formas.


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1 comentario:

  1. Si pasáis por Madrid antes del 6 de setiembre no dejéis de ver la exposición sobre el Islam en el Foro de la Caixa.Su arte, su diversidad etc...
    Avda de la Castellana.
    MEC

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