martes, 8 de marzo de 2022

****** DiaDeLaMujer******

 La mujer hoy, en la sociedad y en la iglesia

Hoy día internacional de la mujer, queremos unir nuestras palabras a otras muchas para expresar que queremos un mundo donde el sexo de las personas no sea razón de discriminación sino parte fundamental de la diversidad humana en la que creemos. Tenemos presentes a tantas niñas y mujeres víctimas de violencias de todo tipo con graves consecuencias físicas, económicas y psicológicas. Las mujeres y las niñas constituyen la mitad de la población mundial. La igualdad de género, además de ser un derecho humano fundamental, es imprescindible para lograr sociedades pacíficas, con pleno potencial humano y capaces de desarrollarse de forma sostenible. “Porque el genio femenino es necesario en todas las expresiones de la vida social; por ello, se ha de garantizar la presencia de las mujeres en el ámbito laboral y en los diversos lugares donde se toman las decisiones importantes, tanto en la Iglesia como en las estructuras sociales” (EEG 103).

Carmen

 En un escrito de San Pedro Poveda del 13 de septiembre de 1914, titulado: LO QUE A UNA MUJER DEBIÓ EL MUNDO, “…hoy, en la época actual, la influencia más decisiva en favor del cristianismo, es la de la mujer; el apostolado más fecundo y la fuerza más potente de la Iglesia de Cristo en la tierra, está en manos de la mujer católica”. Poveda estaba convencido de la importancia de la mujer, “la fuerza más potente de la Iglesia”, dice, por eso su empeño en la importancia de la formación, de la preparación y la presencia de la mujer en todos los ámbitos de la sociedad. Hoy tenemos una gran oportunidad, estamos viviendo un tiempo de sinodalidad, no dejemos de decir nuestra  palabra, de expresar nuestras inquietudes, de denunciar las estructuras injustas, de desear una iglesia que muestre el verdadero rostro de Jesús el Señor.

Mariana

 La mujer debe quererse a sí misma. Reconocer su valor. Tener un criterio propio. Todos tenemos que impulsar y promover una sociedad en igualdad.

Carmen

 La mujer en la sociedad está teniendo un papel más " igualitario" con los hombres en las sociedades más desarrolladas, aunque falta mucho para que sea una realidad, la mujer en el mismo empleo que el hombre gana menos, no tiene acceso a puestos de responsabilidad, la maternidad también la discrimina… y en los países menos desarrollados aún están más discriminadas, a causa de la pobreza, la falta de cultura y se les une la discriminación por la religión. En la Iglesia también existe discriminación de la mujer, lo estamos viendo y viviendo, pienso que queda mucho para la plena consideración. Confiamos en que el Espíritu soplará en esta dirección.

M. Angustias

 El día 8 de marzo de hace ya muchos años...1857,...miles de trabajadoras textiles salieron a las calles de New York uniendo sus voces para que  la sociedad fuera consciente de sus míseras condiciones laborales. Desde entonces hasta hoy ,estas voces se agrandan  y cada vez  somos más las mujeres  que aprovechamos este día simbólico para unir nuestras  voces y reivindicar  con ESPERANZA que se haga justicia  reconociendo  el papel fundamental que la mujer ocupa en la sociedad.

Patri 

Para mí es importante como hoy que celebra los logros de la mujer y reivindica la lucha para seguir avanzando.

Elena

En nuestra fiesta brindemos por las mujeres que han luchado sin descanso para nuestro reconocimiento hasta el día de hoy. Y por el compromiso de seguir luchando por la igualdad y dignidad que sabemos tenemos, pero sin el aprecio a veces, de la sociedad y de la iglesia.

Lola

Con motivo del día internacional de la mujer, se habla principalmente de la diferencia que ha existido entre los géneros mujer y hombre. Se enfatiza y se seguirá haciendo hasta conseguir la plena igualdad. No se habla tanto, de la diferencia, entre personas mujeres y hombres: más cultos, menos formados. Con trabajo más agradable o más duro y penoso. Con mejor posición social o más baja. Con más posibilidad económica, con más necesidades sin poderlas cubrir. No observo movimiento social a favor de aminorar esas diferencias. La Iglesia lo intenta pero consigue poco.

Antonio

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